jueves, 19 de mayo de 2016

Imagenes de la sala.Plsmocitoma óseo solitario

Imágenes de la sala. Plasmocitoma óseo solitario


Paciente de 72 años derivado de una localidad vecina se interna en el hospital Pintos de Azul con una tumoración en región esternal de 3 meses de evolución.
Según el paciente, quien no presenta antecedentes clínicos, ni personales ni familiares, y que se desempeñó toda su vida en tareas rurales, comienza hace 3 meses con la aparición de una tumoración en región medioesternal que tuvo un más rápido crecimiento en los últimos 45 días. La misma es indolora. No refiere síntomas sistémicos, fiebre, sudoración nocturna, ni adelgazamiento.
En el examen físico se palpa una masa localizada en región esternal media de 15 cm de largo por 10 cm de ancho y 8 cm de altura, dura con leve aumento de temperatura en su superficie, que despierta dolor leve, en la región medioesternal. La masa está firmemente adherida a los planos óseos. El resto del examen es normal
En el laboratorio presenta: GR 3410000/mm3. GB 7700/mm3 con fórmula normal Hb 10,3. Hto 31% Plaquetas 407000/mm3. Urea 44 mg%, creatinina 1,1 mg%. VSG 5 mm/hora. Proteínas totales 10,6 Gr/dl Albúmina 3,3 Gr/dl, se solicitó proteinograma electroforético. Hepatograma s/p FAL 275 mg% (250) Proteinuria de Bence Jones negativa.
Se solicitaron Rx de cráneo, columna, pelvis, que no mostraron anormalidades. En la Rx de tórax presenta pequeño derrame pleural derecho y seudo ensanchamiento mediastínico por masa localizada en región anterior de tórax. Los bordes del esternón no se ven con claridad en el perfil de la Rx de tórax

Se llevó a cabo biopsia quirúrgica de la masa.


La Masa proyectada en la radiografía de tórax de frente da la imagen de pseudoensanchamiento mediastinal. 


TC de tórax. A nivel preesternal se observa una masa con densidad de partes blandas. 

Se llevó a cabo una PAMO y una biopsia quirúrgica de la masa preesternal que mostró los siguientes resultados: Análisis histopatológico: proliferación linfoide monomorfa de células de mediano tamaño con núcleos leptocromáticos y nucleolos prominentes. Inmunomarcación: CD45(+) CD20(-) CD3(-) CD79(+)
Conclusión : Plasmocitoma poco diferenciado
Se espera el resultado de PAMO y proteinograma electroforético. Se está evaluando si se trata de un mieloma múltiple o de un plasmocitoma óseo localizado.
Se recibió resultado de PAMO que informa médula ósea normal y 1% de células plasmáticas, por lo que se confirma el diagnóstico de plasmocitoma óseo solitario

Plasmocitoma

Un plasmocitoma es una masa solitaria de células plasmáticas neoplásicas monoclonales que se encuentra a nivel óseo (plasmocitoma óseo solitario) o en tejidos blandos (plasmocitoma extramedular).
Para simplificar, los plasmocitomas solitarios pueden ser divididos en 2 grupos de acuerdo a su localización:
1) Plasmocitomas óseos
2) Plasmocitomas extramedulares

Criterios diagnósticos para plasmocitoma óseo solitario:
Los criterios para identificar plasmocitoma óseo solitario varía entre los autores. (1,2,3) Algunos incluyen pacientes con más de una lesión y niveles elevados de proteínas de mieloma y excluyen pacientes cuya enfermedad progresó dentro de los dos años o cuyo nivel de proteinemia persistió después de la radioterapia. Con el uso de RMN, citometría de flujo, reacción en cadena de polimerasa (PCR) los criterios actualmente aceptados son como sigue (4,5)

1) Área única de destrucción ósea debido a células plasmáticas clonales.
2) Infiltración de células plasmáticas en médula ósea que no exceden del 5% de las células nucleadas
3) Ausencia de lesiones óseas líticas u otro compromiso tisular (no evidencia de mieloma)
4) Ausencia de, anemia, hipercalcemia o insuficiencia renal atribuibles a mieloma
5) Baja, si es que está presente, concentración de proteínas monoclonales séricas o urinarias
6) Niveles preservados de inmunoglobulinas no comprometidas

Criterios diagnósticos de plasmocitoma extramedular:
Los criterios diagnósticos de plasmocitoma extramedular son como sigue (6)
1) Biopsia tisular que muestra células plasmáticas monoclonales (histología)
2) Infiltración de médula ósea por células plasmáticas que no excedan de 5% de todas las células nucleadas
3) Ausencia de lesiones óseas líticas o compromiso de otros tejidos (ausencia de mieloma)
4) Ausencia de hipercalcemia o insuficiencia renal
5) Baja concentración de proteína M, si está presente

Patofisiología
El plasmocitoma puede asentar en cualquier parte del cuerpo. Un plasmocitoma óseo solitario deriva de las células plasmáticas localizadas en médula ósea, mientras que el plasmocitoma extramedular se considera que deriva de las células plasmáticas de las superficies mucosas. (7) Ambas representan un grupo diferente de neoplasias en términos de localización, progresión tumoral, y tasa de sobrevida(8,9) Algunos autores sugieren que el plasmocitoma óseo solitario representa linfoma de células marginales con diferenciación plasmocitaria extensa. (9)
Tanto el plasmocitoma óseo solitario como el plasmocitoma extramedular sin embargo, comparten muchos de los elementos biológicos de otras células plasmáticas.
Los estudios citogenéticas muestran pérdida recurrente en el brazo largo del cromosoma 13 y en el brazo corto del cromosoma 14, así como ganancias en el brazo largo del cromosoma 19, largo del 9 y corto del 1. (10) La interleukina 6 (IL-6) es todavía considerada el principal factor de crecimiento en la progresión de los trastornos de células plasmáticas. (5)
Los roles específicos de los marcadores de superficie, moléculas de adhesión y angiogénesis en plasmocitoma solitario, necesitan ser estudiados más.
En un estudio de Kumar y col, el alto grado de angiogénesis en plasmocitoma óseo solitario, estuvo asociado a progresión mas rápida a mieloma múltiple. Algunos han postulado que el plasmocitoma óseo solitario es un paso intermedio desde la gamapatía monoclonal de significado incierto (MGUS) a mieloma múltiple. (5)
Frecuencia:
Los plasmocitomas óseos solitarios representan menos del 5% de las gamapatías monoclonales (4,5), y el plasmocitoma extramedular el 3% de las mismas.

Morbi/mortalidad:
1) El plasmocitoma óseo solitario evoluciona a mieloma múltiple en 50 a 60% de los pacientes. (12) La sobrevida media es de 10 años. (13)
2) El plasmocitoma solitario extramedular evoluciona a mieloma múltiple en 11-30% de los pacientes a los 10 años. La sobrevida a 10 años es 70%

Sexo:
El plasmocitoma óseo solitario tiene una relación hombre/mujer de 2:1
Tres cuartas partes de los extramedulares afectan a los hombres.(6,7,13,14,15)
Edad:
Para ambos (óseo y extramedular la edad de presentación es 55 años., 10 años mas jóvenes que el mieloma múltiple. (6,7,13,14,15)

Clínica:
Plasmocitoma óseo solitario
El síntoma mas común es el dolor en el sitio de la lesión esquelética debido a la destrucción ósea por infiltración con células plasmáticas tumorales. (5,16)
Fracturas de cuerpos vertebrales lumbares y dorsales pueden producir dolor severo por compresión. Algunos pacientes pueden experimentar compresión de las raíces o de la médula espinal. (5) La compresión de la médula representa una emergencia oncológica/neuroquirúrgica que requiere inmediato diagnóstico y tratamiento para evitar daño definitivo. (paraplejia, disfunción vesical e intestinal, dolor crónico)
El dolor pleurítico debido a fracturas costales o claviculares patológicas, se asocian con marcado dolor en la zona.
Plasmocitoma extramedular solitario:
Se presenta como una masa que crece en el tracto aerodigestivo en el 80 a 90% de los casos, a menudo con diseminación a los ganglios linfáticos, aunque también se pueden afectar otros sitios.
Las quejas comunes incluyen inflamación, cefalea, rinorrea, epistaxis, obstrucción nasal, odinofagia, ronquera, disfonía, disfagia, disnea, dolor epigástrico y hemoptisis. (6)
Los síntomas por afectación de otros tejidos están asociados con el sitio y el tamaño del tumor, y la compresión y o compromiso de estructuras vecinas.
Los plasmocitomas extramedulares que comprometen el pulmón más comúnmente se presentan como nódulos o masas hiliares

Examen físico
Plasmocitoma óseo solitario
Puede comprometer cualquier hueso, pero tiene predisposición por la médula ósea del esqueleto axial. La enfermedad espinal es observada en 34 a72% de los casos. Las vértebras torácicas están mas frecuentemente comprometidas, seguidas por las lumbares, sacras y cervicales. (4). Las costillas, esternón, clavícula, o escápula se afectan en el 20% de los casos. (17) El examen físico está relacionado con el sitio de compromiso, presentándose como masa dolorosa, fractura patológica, o compresión de las raíces y médula espinal.
Los pacientes con compromiso de huesos largos pueden debutar con fracturas patológicas. (4)
Ocasionalmente los pacientes con plasmocitoma óseo solitario se presentan con polineuropatía, (18,19) o con hallazgos consistentes con el síndrome de POEMS (polineuropatía, organomegalia, endocrinopatía, proteína M, y cambios cutáneos) (20)

Plasmocitoma extramedular
Aunque el plasmocitoma extramedular puede ocurrir en cualquier sitio, 80 a 90% de los tumores desarrollan en cabeza y cuello especialmente en tracto aerodigestivo.
Aproximadamente 80% de los casos comprometen la mucosa de senos paranasales, faringe, cavidad nasal, encias o mucosa oral (4,6,7,14,15) Una masa (plasmocitoma) en esas áreas es el hallazgo más común con compresión o invasión de estructuras vecinas. Los pacientes con tumor en base de cráneo se pueden presentar con parálisis de pares craneales.
Hay reportes de casos de compromiso de vejiga urinaria, vesícula, sistema nervioso central, órbita, tracto gastrointestinal, hígado, bazo, páncreas, pulmón, mama, piel, testículos, parótida, mediastino, tiroides. (4,6,7,14,15)
En 30 a 40% de los casos, los ganglios linfáticos están afectados en la presentación o en las recidivas.(13)
Causas:
No hay causa definida para el plasmocitoma óseo solitario, sin embargo en las formas extramedulares la forma de presentación mucosa del tracto aerodigestivo (>80%) se sospecha que pueda estar relacionada con estimulación de irritantes inhalados o infección viral. (7)

Diagnóstico diferencial:
Linfoma inmunoblastico de alto grado
Linfoma no Hodgkin
Linfoma B de zona marginal
Granuloma de células plasmáticas
Neoplasias pobremente diferenciadas
Plasmocitosis reactiva

Laboratorio:
Plasmocitoma óseo solitario

* Aunque los niveles son menores que en el mieloma múltiple, la electroforesis revela una proteína monoclonal en suero y en orina en 24 a 72% de los pacientes. (21,22,23,24,25,26,27,28)
*Las inmunoglobulinas no comprometidas están usualmente en rango de referencia
El recuento en sangre periférica , función renal y calcio están dentro del rango de referencia

Plasmocitoma extramedular solitario
La electroforesis sérica muestra un componente monoclonal en 14 a 25% de los casos. (4,6,15) En una serie de 46 pacientes de Galieni y col todos los pacientes tenian las inmunoglobulinas normales.(6)
El recuento de sangre periférica, la función renal y el calcio están dentro del rango de referencia

Imágenes
Plasmocitoma óseo solitario
En la Rx, clásicamente tiene aspecto osteolítico con un margen claro y una estreacha zona de transición hasta la zona sanaque lo rodea. (5) Raramente se ven quistes, lesiones trabeculadas que recuerdan al tumor de células gigantes o un quiste aneurismático óseo. (29) La lesión esclerótica está asociada con polineuropatía, organomegalia, endocrinopatía y cambios cutáneos (síndrome POEMS). (30)
En RMN es hipointenso en T1 e hiperintenso en T2 o en STIR, que en un contexto adecuado es consistente con plasmocitoma óseo solitario. (31)

Plasmocitoma extramedular solitario
Las Rx muestran destrucción ósea en la mayoría de los pacientes con compromiso de cavidad nasal o compromiso de senos paranasales. (15)
La TAC, RMN, y el examen endoscópico del tracto aerodigestivo y gastrointestinal se requieren para determinar la exacta extensión del tumor, y su potencial resecabilidad. (14) Esas lesiones pueden estar asociadas con variable efecto de masa, infiltración y/o destrucción de hueso adyacente, músculo, grasa o compromiso vascular. (32)

Histología
El plasmocitoma óseo solitario revela infiltración ósea por células plasmáticas monoclonales
El plasmocitoma extramedular muestra infiltración por células plasmáticas monoclonales, con crecimiento submucoso, requiriendo biopsia profunda, o biopsia abierta o extirpación completa dependiendo de la localización del tumor. (14). Histológicamente se clasifican como de bajo, intermedio o alto grado. (33) La PAMO muestra <5 color="#ff0000">Estadificación
Wiltshaw clasificó los plasmocitomas de tejidos blandos en 3 estadios como sigue:
Estadio I. Limitado a un sitio extramedular.
Estadio II. Compromiso de ganglios linfáticos regionales.
Estadio III. Múltiples metástasis (aunque aquí no se podría hablar de plasmocitoma solitario)

El pronóstico depende de esta clasificación

Tratamiento
Tratamiento médico
Plasmocitoma óseo solitario:
La radioterapia local es el tratamiento de elección. (4,5,13,22)
El control local se logra 88 a 100% de los pacientes. Virtualmente todos los pacientes tienen alivio sintomático(13) y la recurrencia tumoral es de aproximadamente 10%
La mayoría de los centros usan 40 Gy para lesiones espinales y 45 para lesiones en otros huesos. Para lesiones más grandes de 5 cm. 50 Gy deben considerarse.
No hay relación entre la dosis y la desaparición de la proteína monoclonal en una serie de pacientes con plasmocitoma óseo solitario (22)
Las proteínas monoclonales se reducen marcadamente después de radioterapia en la mayoría de los pacientes, pero la desaparición se observa solo en 20 a 50% de los pacientes. (14)
La cirugía está contraindicada en ausencia de inestabilidad estructural o compromiso neurológico. (12)
La quimioterapia puede ser considerada en los pacientes que no responden a la radioterapia, y el tratamiento es similar a los regímenes utilizados en mieloma múltiple.
No hay lugar para la quimioterapia adyuvante en el plasmocitoma óseo solitario.

Plasmocitoma extramedular
La radioterapia es el tratamiento de elección.
Cuando una lesión es completamente resecada, la cirugía provee los mismos resultados que la radioterapia
La terapia combinada (cirugía y radioterapia) es un tratamento aceptado dependiendo de la resecabilidad de la lesión (4,6,13,14,15), y puede ofrecer los mejores resultados. (14)
La dosis óptima para control local es 40-50 Gy (dependiendo del tamaño tumoral) aplicadas en el término de 4-6 semanas (13,14,15)
Debido a la alta tasa de compromiso ganglionar esas zonas deben ser incluidas en el campo de radiación. (13)
La radioterapia adyuvante debe ser recomendada para pacientes con márgenes quirúrgicos positivos
La quimioterapia puede ser considerada para pacientes con enfermedad refractaria o recidivada, con los mismos regímenes que para mieloma múltiple. (12)
La quimioterapia adyuvante puede ser considerada para pacientes con tumores mas grandes de 5 cm. Así como aquellos con histología de alto grado

Tratamiento quirúrgico
Aunque la resección quirúrgica no es aconsejada para el tratamiento del plasmocitoma óseo solitario, cuando hay compromiso de columna a veces son necesarios estos tratamientos para restablecer la arquitectura normal de la columna u otros huesos afectados
Si es posible la resección de la lesión, incluyendo disección de ganglios linfáticos, debe ser intentado para los plasmocitomas extramedulares

Seguimiento
Cuidado ambulatorio posterior
La evaluación periódica para la progresión y desarrollo de mieloma múltiple es recomendada cada 6 semanas por los primeros 6 meses en plasmocitomas óseos solitarios y extramedulares. Se deben realizar los siguientes tests: Recuento completo de células sanguíneas, panel metabólico completo con LDH calcio fósforo, PCR, y beta2 microglobulina. Eritrosedimentación, electroforesis sérica con inmunofijación, cuantificación de inmunoglobulina sérica. Electroforesis urinaria con inmunofijación (en muestra de 24 hs). Evaluación ósea completa

Pronóstico
Plasmocitoma óseo solitario
Progresa a mieloma múltiple en una tasa de 65 a84% a 10 años y 65 a 100% a 15 años
La tasa promedio de conversión a mieloma múltiple es 2 a 5 años con una tasa de sobrevida de 15-46%
El tiempo medio de sobrevida es 10 años
Kyle describió 3 formas de fallo de tratamiento (16): desarrollo de mieloma múltiple (54%), recurrencia local (11%) y desarrollo de nuevas lesiones óseas en ausencia de mieloma múltiple (2%)
La probabilidad de evolucionar de plasmocitoma óseo solitario a mieloma múltiple está en relación a: 1) tamaño de la lesión de mas de 5 cm. 2) pacientes de más de 40 años, 3) alto nivel de proteína M, 4) persitencia de la proteína M después del tratamiento, 5) lesiones espinales
En un estudio de Wilder y col la sobrevida libre de mieloma fue de 91% versus 29% en pacientes cuya proteína M no se resolvió al año de la radioterapia. (34)

Plasmocitoma extramedular
La tasa de sobrevida a 10 años es 70%
La tasa de progresión a mieloma múltiple es menor que en plasmocitoma óseo solitario y va desde el 11 a 30% a los 10 años. Los pacientes con plasmocitoma extramedular que progresan a mieloma múltiple tienen una tasa de sobrevida a los 5 años de 100% comparados con 33% de plasmocitomas óseos solitarios (35) En una revisión de 721 casos de Alexiou y col, después del tratamiento, aproximadamente 65% de los pacientes estuvieron libres de recurrencia y no progresaron a mieloma múltiple, 22% experimentaron recurrencia, y 15% de los casos evolucionaron a mieloma múltiple (14)
En un estudio, el control local siguiendo a la radioterapia se logró en 83% de los casos con bajo grado versus 17% en los tumores de grado intermedio o alto. (33)

Fuente


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extramedullary plasmacytoma, plasma cell tumor, plasmocytoma, plasmacytoma of the skeletal system, solitary bone plasmacytoma, SBP, soft tissue plasmacytoma, EMP, neoplastic monoclonal cell, bone marrow, multiple myeloma
Contributor Information and Disclosures
Author
Suzanne R Fanning, DO, Medical Oncologist, Cancer Centers of the CarolinasSuzanne R Fanning, DO is a member of the following medical societies: American College of Physicians, American Medical Association, and American Society of Hematology Disclosure: Nothing to disclose
Coauthor
Mohamad A Hussein, MD, Clinical Director, Malignant Hematology, Moffitt Cancer CenterMohamad A Hussein, MD is a member of the following medical societies: American Association of Blood Banks, American College of Physicians, American Medical Association, and American Society of Hematology Disclosure: Nothing to disclose
Medical Editor
Paul Schick, MD, Emeritus Professor, Department of Internal Medicine, Thomas Jefferson University Medical College; Research Professor, Department of Internal Medicine, Drexel University College of MedicinePaul Schick, MD is a member of the following medical societies: American College of Physicians, American Heart Association, American Society of Hematology, International Society on Thrombosis and Haemostasis, and New York Academy of Sciences Disclosure: Nothing to disclose
Pharmacy Editor
Francisco Talavera, PharmD, PhD, Senior Pharmacy Editor, eMedicineDisclosure: Nothing to disclose
Managing Editor
Wendy Hu, MD, Consulting Staff, Department of Hematology/Oncology and Bone Marrow Transplantation, Huntington Memorial Medical CenterWendy Hu, MD is a member of the following medical societies: American Association for the Advancement of Science, American College of Physicians, American Society for Blood and Marrow Transplantation, American Society of Hematology, and Physicians for Social Responsibility Disclosure: Nothing to disclose
CME Editor
Rajalaxmi McKenna, MD, FACP, Consulting Staff, Department of Medicine, Southwest Medical Consultants, SC, Good Samaritan Hospital, Advocate Health SystemsRajalaxmi McKenna, MD, FACP is a member of the following medical societies: American Society of Clinical Oncology, American Society of Hematology, and International Society on Thrombosis and Haemostasis Disclosure: Nothing to disclose
Chief Editor

Emmanuel C Besa, MD, Professor, Department of Medicine, Division of Hematologic Malignancies, Kimmel Cancer Center, Thomas Jefferson UniversityEmmanuel C Besa, MD is a member of the following medical societies: American Association for Cancer Education, American College of Clinical Pharmacology, American Federation for Medical Research, American Society of Hematology, and New York Academy of Sciences Disclosure: Nothing to disclose

Justo a tiempo

En este ejercicio clínico se presenta un caso que es discutido por un médico internista al que se le van proporcionando datos de la historia clínica en forma secuencial, y este analiza el cuadro a la luz de los nuevos elementos, de una manera análoga al proceso diagnóstico en la práctica real de la medicina
Una joven de 15 años no había podido concurrir a la escuela por tres meses debido a excesiva fatiga. Los últimos siete meses había tenido dificultad respiratoria al esfuerzo, aunque no sibilancias ni tos. Durante ese tiempo ella había perdido 6,8 kg de peso y tenía amenorrea. Sus familiares asociaban el comienzo de sus síntomas con la aplicación derefuerzo de la vacuna difteria-tétanos y sarampión. La paciente no tenía antecedentes de enfermedades importantes, y su historia familiar no era de interés médico.
Estaba delgada y pálida. Pesaba 40 kg y su altura era de 155 cm. Su respiración no era laboriosa; su frecuencia cardiaca de 94 por minuto, regular, y sin galope; su TA era de 87/52 mm Hg, y estaba afebril. Tenía múltiples nevus ninguno de los cuales tenía características anormales. Sus pilares amigdalinos estaban rojos pero sin exudado, y tenía pequeñas adenomegalias cervicales anteriores y posteriores. El resto del examen era normal. Una muestra de materia fecal fue negativa para sangre oculta.

La pérdida de peso, dificultad respiratoria y la amenorrea no se ven en el síndrome de fatiga crónica. Los trastornos que pueden afectar a los niños y adolescentes, diferentes del síndrome de fatiga crónica incluyen la enfermedad de Crohn, u otras enfermedades granulomatosas, anorexia nerviosa, hipertiroidismo, condiciones malignas, enfermedades autoinmnes, tuberculosis, y síndrome de malabsorción tal como enfermedad celíaca.Los trastornos respiratorios son síntomas poco frecuentes en las entidades mencionadas a menos que tenga severa anemia.

El laboratorio inicial así como la evaluación radiográfica reveló lo siguiernte: glóbulos blancos 7400 con fórmula normal; hemoglobina 13,6g/dl; hematocrito39,7% plaquetas 295.000/mm3; VCM 77,2 um3; eritrosedimentación 38 mm; nivel de inmunoglobulinas dentro de lo normal, albúmina 4 gr/dl; LDH 580 UI /L. Enzimas hepáticas sp, test para CMV, Epstein-Barr, ASTO y FAN negativos.

Con tantos resultados normales en una niña que parece crónicamente enferma, la enfermedad de Crohn, la anorexia nerviosa y alguna condición maligna debe ser considerada.
La paciente volvió una semana más tarde con fatiga y nuevos síntomas, dolor epigástrico, y nauseas. Fue admitida al hospital. En el interin, un lunar fue extirpado el cual no mostró ser displásico. Su examen físicono cambió. Los estudios de laboratorio revelaron niveles normales de tiroxina, TSH, amilasa, calcio, magnesio, proteínas totales y albúmina. Una seriada gastroduodenal y un tránsito del delgado demostró una marcada hiperplasia linfoide del ileon terminal. Después de la consulta gastroenterológica una endoscopía alta y una colonoscopía fueron llevadas a cabo. El único hallazgo anormal fue una apariencia nodular del antro gástrico: el colon y el ileon terminal impresionaban normales. Se encontró Helicobacter pylori fue encontrado en el antro en un análisis histológico, mientras que las muestras de mucosa del duodeno, ileon, y colon mostraron solo leve infiltrado eosinofílico.

H. pylori puede ser causa de dolor y nauseas, pero, es el problema primario? H.pylori es improbable que cause fatiga o amenorrea. Yo he visto asociación entre H pylori con otras condiciones, tales como enfermedad inflamatoria intestinal y estados de inmunodepresión, pero su relación con esos estados es incierta. Por lo tanto, yo trataría el H. pylori aunque no esperaría la resolución de todos los síntomas y signos. Una TAC de abdomen para evaluar retroperitoneo buscando adenomegalias o enfermedad metastásica puede ser útil. Además, una cuidadosa historia clínica orientada a laimagen corporal de la niña y hábitos de alimentación son necesarios.
La paciente fue tratada con amoxicilina, metronidazol y susalicilato de bismuto. Ella era capaz de comer una dieta regular así que fue dada de alta, pero volvió al hospital tres días más tarde con vómitos biliosos, dolor abdominal difuso y deshidratación. Aunque la frecuencia de sus deposiciones y la consistencia eran normales, experimentaba cierta urgencia con cada deposición. El nivel de electrolitos séricos era el siguiente: sodio 134meq/l potasio 3,9 meq/l cloro 96 meq/l; dióxido de carbono 16 mmol/l. Los resultados de un análisis completo de sangre y de orina fueron normales. Las Rx de abdomen tomadas tomadas en decúbito dorsal y de pie, no demostraron obstrucción ni perforación, aunque los pliegues en la tercera porción del duodeno estaban engrosados de manera inespecífica.
La revisión de la medicación reveló que la dosis de metronidazol era grande (60 mg/kg de peso/día); la dosis fue reducida, y se agregó omeprazol al régimen terapéutico.Los síntomas agudos se resolvieron. Debido a los eosinófilos encontrados en la biopsia intestinal previa, se le indicó una dieta libre de lacteos. Los síntomas intestinales se resolvieron, comenzó a ganar peso y fue dada de alta. Sin embargo, fue reinternada dos semanas mas tarde con dolor abdominal en cuadrante superior izquierdo, vómitos, diarrea, y deshidratación. El examen reveló una TA de 83/44 y un pulso de 96 por minuto. Había perdido otros 2,1 kg de peso y tenía dolor abdominal sin signos peritoneales. Se la notaba severamente desnutrida.

La paciente stá empeorando. Esto, claramente no es atribuible a H. pylori, así que es tiempo de reevaluar el caso clínico desde el principio. El diagnóstico diferencial incluye enfermedad inflamatoria intestinal, anorexia nerviosa, síndrome de Munchausen, gastroenteritis eosinofílica, enfermedad malignaabdominal tal como linfoma o tumor neuroendocrino. Además de repetir los tests de laboratorio necesitamos llevar a cabo estudios de imágenesy quizás otra endoscopía. Si las biopsias repetidas son consistentes con gastritis eosinofílica un tratamiento de prueba con prednisona estaría indicado.
Los niveles de electrolitos, calcio, magnesio, y fósforo fueron normales; los niveles de alanino amino transferasas y lipasa estaban mínimamente elevados. Una Rx de tórax, una Rx de abdomen y una RMN de cerebro no mostraron anormalidades. Una nueva endoscopía mostró gastritis en resolución, y otra colonoscopía fue normal. Un leve infiltrado eosinofílico se encontró en estómago, duodeno y recto. H. pylori no se encontró en la nueva biopsia gástrica.
La orina enviada para análisis en la internación anterior fue positiva para emetina a un nivel de 50 ng/ml. Tanto la paciente como sus familiares negaron firmemente usar ipecacacuana, que es un agente vomitivo. Se intentó comenzar con alimentación enteral por sonda nasogástrica pero debió interrumpirse por vómitos persistentes. Se comenzó alimentación parenteral. El consultante endocrinólogo consideró la amenorrea de la paciente como secundaria a trastornos de la alimentación.

Felicitaciones al que se le ocurrió pedir investigación de emetina en orina pensando en envenenamiento. Si se asume este resultado como válido, la pregunta es si esta intoxicación es auto inducida (esto es parte de la bulimia), o si la paciente está siendo envenenada por un miembro de la familia. Yo estoy de acuerdo que todos los esfuerzos deben ser puestos para evitar nuevas ingestas de emetina. Asumo que la paciente y sus familiares deben ser sometidos a una detallada evaluación psiquiátrica.
Una completa investigación psiquiátrica fue diferida, y mas bien se consideró la consulta con el servicio de protección a menores. Durante este tiempo la niña tuvo una taquicardia sinusal persistente ( frecuencia cardiaca de 112 a 133 latidos por minuto) a pesar de la correcta hidratación. La TA era de 81/40 a 110/56 mmHg. Se sospechó cardiotoxicidad por emetina.
Durante el curso de la hospitalización, los siguientes niveles de electrolitos séricos fueron recibidos: Sodio 128 meq/l; Potasio 6,3 meq/l; Cloro 94 meq/l; y dióxido de carbono, 15 mmol/l.
Cual es el diagnóstico? 

Las anormalidades de los electrolitos séricos sugieren insuficiencia adrenal. Pueden esas alteraciones ser inducidas por la nutrición parenteral? Está la paciente recibiendo diuréticos ahorradores de potasio? Este nivel de electrolitos sugieren leve acidosis metabólica más que alcalosis hipoclorémica, que es lo que debiera esperarse en una paciente con vómitos crónicos. Ciertamente yo la evaluaría para insuficiencia adrenal.
Una evaluación psiquiátrica no sostuvo el diagnóstico de trastornos de alimentación. Repetidos tests en búsqueda de emetina tanto en sangre como en orina fueron negativos. La paciente no estaba tomando diuréticos y el hallazgo de la anormalidad electrolítica persistió a pesar de la vigorosa hidratación pareneteral.
Los niveles de corticotrofina fueron medidos y se encontró en valores de 800 pg/ml (límite superior normal, 100 pg/ml). El cortisol plasmático era indetectable antes y 30 minutos después de la administración de 0,25 mg de cosyntropin. La aldosterona plasmática era indetectable y la actividad de renina plasmática estaba marcadamente elevada (44 ng/ml/hora). Las muestras de sangre fueron tomadas con la paciente en posición sentada el día en que el sodio sérico era de 131 meq/l y la ingesta de sodio era de 90 meq en 24 hs. Los hallazgos fueron consistentes con enfermedad de Addison.
La paciente fue tratada con hidrocortisona y fludrocortisona, con rápida normalización del nivel de electrolitos, mejoró el apetito y recuperó el peso. Las menstruaciones reaparecieron tres meses después.

Como reflexión, la única forma de haber hecho antes el diagnóstico de enfermedad de Addison si hubiera puesto a la enfermedad en la lista de diagnósticos diferenciales de anorexia nerviosa, pero no lo hice.
Comentario:

Los finales catastróficos acechan a los pacientes que presentan enfermedades graves y que no solo son raras, sino que también se presentan con síntomas y signos atípicos o inespecíficos. Los pacientes con enfermedades que llenan esta descripción, se ven sometidos a una gran cantidad de estudios y de tests tratando de arribar al diagnóstico. Muchos pacientes mueren, debido a que un correcto diagnóstico es nunca llevado a cabo y aún después de la autopsia el misterio a menudo persiste.
Una y otra vez la desafortunada niña describía sus síntomas como debilidad, dificultad respiratoria, dolor abdominal, nausea, vómitos, diarrea, pérdida de peso, y severa malnutrición.
El examen nunca demostró ningún hallazgo más allá que taquicardia, hipotensión leve y deshidratación. Ni la paciente ni el clínico y otros consultantes, ni el médico que hizo el análisis del caso consideraron el diagnóstico correcto, enfermedad de Addison, en base a los hallazgos clínicos. El diagnóstico fue obvio cuando hiponatremia, hipercalemia e hipobicarbonatemia desarrollaron meses después de la presentación inicial. Mientras tanto la paciente fue sometida a docenas de análisis de sangre, estudios inmunológicos, endoscopías, centelleogramas, otros tests radiográficos y biopsias. Además, hubo un tema de envenenamiento con ipecacuana debido a un desafortunado falso test positivo para emetina, y la posibilidad de una causa psiquiátrica fue asimismo considerada.
Quien tiene la culpa en este caso? Retrospectivamente, el diagnóstico parece obvio. Fatiga, debilidad, deshidratación e hipotensión son las manifestaciones clásicas de la enfermedad de Addison, y los infiltrados eosinofílicos en el intestino así como la hiperplasia linfática en la endoscopía pueden también estar relacionados con la insuficiencia adrenal. Un raro diagnóstico, que es obvio en retrospectiva, no es, sin embargo tan obvio prospectivamente. Cuando los hallazgos del paciente son inespecíficos (como lo fueron en este caso) el número de posibilidades diagnósticas es a menudo enorme, y los clínicos a usualmente comienzan la investigación diagnóstica considerando y excluyendo los diagnósticos mas comunes. A medida que los diagnósticos mas comunes se van descartando se comienzan a considerar trastornos menos comunes. Desafortunadamente en este caso, la enfermedad de Addison no fue considerada en la lista de diagnósticos diferenciales hasta que casi fue demasiado tarde para salvar la vida de la paciente.
No se puede culpar a ninguno de los clínicos que asitieron a la paciente por no considerar el diagnóstico correcto antes, pero si, sería irresponsable si este caso no sirviera como aprendizaje y no se aprovecha la lección de este paciente. La enfermedad de Addison es muy rara en este grupo etáreo. De hecho, en niños, la insuficiencia suprarrenal es mas común en el período neonatal como consecuencia de un defecto en la síntesis de hormonas adrenales. La adrenoleucodistrofia da cuenta de una gran fracción de los casos de enfermedad de Addison en la niñez tardía, pero la mayoría de los pacientes, sino todos son varones. (1) Finalmente, la gran mayoría de pacientes con enfermedad de Addison tienen hiperpigmentación y un típico patrón electrolítico cuando son vistos por primera vez. (2) No obstante, como ilustra este caso, la enfermedad de Addison, aunque rara, ocurre, y puede estar presente por largos períodos sin sus manifestaciones clásicas.Quizás la única forma de hacer este diagnóstico antes hubiese sido apreciar que ninguno de los otros diagnósticos explicaban todos los hallazgos clínicos. En este punto un recurso clínico podría haber sido explorar la lista de condiciones (no importa cuan raras y atípicas fueran) De hecho, cuando un diagnóstico es correcto, debe explicar todos los hallazgos anormales así como los hallazgos normales.
La paciente sobrevivió no solo a su enfermedad sino a la miríada de tests y tratamientos administrados antes de que el revelador conteo de electrolitos revelara el diagnóstico. Afortunadamente esto ocurrió “justo a tiempo”.
Fuente:
"Just in Time" Solving clinical problem solving. ("The New England Journal of Medicine")January 4-1996)
David J. Keljo, M.D., Ph.D., and Robert H. Squires, M.D.

1) Bethune JE. The diagnosis and treatment of adrenal insufficiency. In: DeGroot LJ, Besser GM, Cahill GF Jr, et al., eds. Endocrinology. 2nd ed. Vol. 2. Philadelphia: W.B. Saunders, 1989:1647-59.
2)Nerup J. Addison's disease -- clinical studies: a report of 108 cases. Acta Endocrinol (Copenh) 1974;76:127-141.[Medline

Cual es el diagnostico?Arteritis de Takayasu

Cual es el diagnóstico? Arteritis de Takayasu

Esta angio resonancia muestra los hallazgos típicos de la arteritis de Takayasu.
La arteritis de Takayasu es una vasculitis granulomatosa de etiología desconocida que comúnmente afecta la aorta torácica y abdominal. Causa una fibroproliferación intimal de la aorta, grandes vasos, pulmonares y renales y que resulta en estenosis segmentaria, oclusión dilatación y formación de aneurismas en esos vasos. La arteritis de Takayasu es la única forma de aortitis que causa estenosis y oclusión de la aorta.
La arteritis de Takayasu es más frecuente en población asiática pero ha sido descripta en pacientes de todas las razas. Las mujeres se afectan más que los hombres (80-90%). En aproximadamente 90% de los casos aparece en menores de 30 añosEsta es una paciente de 32 años asiática con insuficiencia renal crónica, con fístula iatrogénica en miembro superior izquierdo que funcionaba débilmente. La causa del mal funcionamiento de la fístula puede ser explicada por el estrechamiento y oclusión de las arterias del miembro superior. Notar también el estrechamiento de la aorta abdominal

Fuente: 
emedicine.com:
Dr Ahmed Haroun

Imágenes de la sala.Sarcoma de Kaposi asociado a LES

Imágenes de la sala. Sarcoma de Kaposi asociado a LES





Paciente internada en servicio de Clínica Médica del hospital Pintos de Azul. Mujer de 74 años con diagnóstico de Lupus eritematoso sistémico desde hace 14 años, que presentó durante el tratamiento con altas dosis de corticosteroides sarcoma de Kaposi en miembro inferior izquierdo que mejoró con el descenso de la inmunosupresión.
Actualmente se encuentra internada por TEP subagudo en el contexto de síndrome antifosfolipídico asociado a LES , con hipertensión pulmonar ( presión sistólica arteria pulmonar estimada por eco de 60 mmHg)
En la imagen se observan las lesiones el sarcoma de Kaposi en estado de involución 

































Ocho años después el estado actual de las lesiones de su pierna es la siguiente:




Enfermedad de Whipple de comienzo brusco a forma polineuritica

ENFERMEDAD DE WHIPPLE DE COMIENZO BRUSCO A FORMA POLINEURÍTICA


ENFERMEDAD ACTUAL
Paciente de 38 años sexo femenino, que acude a urgencias por cuadro de 72 horas de evolución de malestar general, artromialgias generalizadas (de predominio en miembros inferiores),
dolor en columna lumbar que se irradiaba hasta nivel cervical, con sensación de rigidez
cervical y parestesias en manos y miembros inferiores, sin alteraciones de la fuerza.
Se acompañaba de vómitos (sin sangre, ni pus, ni restos patológicos), que se habían
exacerbado las últimas 24 horas hasta un número superior a 10, con intolerancia para
la ingesta. No cefalea, ni fiebre. No alteraciones del hábito intestinal, ni dolor abdominal.
Sólo asociaba también leve tos seca con mucosidad nasal blanquecina, sin disnea, y
sin otros síntomas. En la exploración neurológica al ingreso los signos meníngeos eran
negativos, sin rigidez de nuca. No se apreciaron alteraciones de los pares craneales, del
tono,  de la fuerza, de la sensibilidad, ni de los reflejos. No se observaron dismetrías
ni disdiadococinesia. No alteraciones del lenguaje, aunque sí describieron una marcha
inestable. Resto de exploración (cardiovascular, respiratorio, abdomen y miembros) sin datos relevantes. A continuación, fue valorada por Internista de guardia, que ingresó a la paciente para estudio, y pautó tratamiento con Metilprednisolona, enantyum y pantoprazol, sin pautar
antieméticos porque los vómitos ya eran escasos.

EXPLORACIONES COMPLEMENTARIAS
Analíticas en urgencias: Hemograma: Hb 12,7g/dl. Hcto 39,3%. Leucocitos 8.100/dl
(PMN 73,9%, Linfocitos 23,1%). Plaquetas 340.000. Coagulación: Fibrinógeno elevado,
resto normal. Bioquímica: PCR 0,25. Función renal e iones normales. Enzimas hepáticas,
amilasa, Bilirrubina, y FAL en límites normales. 

Pruebas de imagen: Radiografía de tórax, abdomen, y columna cervical y lumbar: sin datos relevantes. ECG: Ritmo sinusal a buena frecuencia, sin trastornos de la repolarización.

EVOLUCIÓN
A las 36 horas del ingreso comienza con debilidad muscular generalizada severa,
sensación disneica e imposibilidad para deglutir (acción que le producía tos y vómitos)
e incontinencia urinaria. En dicho momento destacaba a la exploración la intolerancia
al decúbito supino, evidente debilidad muscular generalizada (que le imposibilitaba
moverse en la cama), sin ptosis palpebral, y un globo vesical. Tenía una saturación 99% y
el resto de constantes en límites normales. Analíticamente, destacaba una hiponatremia
(Na 122 mEq/l) e hipopotasemia (3,4 Me/l),  sin otros datos de interés. En escasas horas, la
paciente evolucionó tórpidamente presentando una insuficiencia respiratoria aguda,
requiriendo intubación orotraqueal y ventilación mecánica. A la exploración llamaba la
atención, unas pupilas medias reactivas a la luz, con fotomotor directo y consensual
conservado. Movimientos nistagmoides espontáneos verticales hacia arriba y flutter
palpebral. Reflejo nauseoso abolido y tusígeno presente. Hipotonía universal, fláccida,
tetraplejia, arreflexia universal y RCP bilateral flexor.

 Al hallarnos sindrómicamente con una Polirradiculoneuropatía aguda sensitivo motora, posible SIADH, e Insuficiencia ventilatoria, se decidió realizar el diagnóstico diferencial con (ver tabla). 



DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL DE POLINEUROPATÍAS AGUDAS SENSITIVO MOTORAS


Se solicitó un TAC craneal sin contraste (sin alteraciones), y posteriormente se realizó una punción lumbar, solicitándose un amplio estudio del LCR (citoquímica urgente, ADA, GRAM, cultivo, lúes VDRL, borrelia, CMV, VHS, VVZ, VEB, enterovirus, West Nile, JC, Toscana, cultivo de micobacterias, listeria, borrelia, chlamydia, coxiella, mycoplasma, anti GAG, anti NMDA, anti canales de potasio, anti gangliósidos, PCR de Tropheryma whipplei y
baciloscopia. Se completó el estudio con las peticiones de:

  • En sangre: ANA, Ac antiDNA, ENAs, ANCAs, ECA, Ac antigangliósidos, Ac onconeuronales, anti-receptor de acetilcolina, anti musk, Serologías de lúes, borrelia, brucella, VHS, CMV, VEB, VVZ, campylobacter jejuni, legionella, ch. psittaci y pneumoniae, coxiella burnetii, mycoplasma pneumoniae, rickettsia conori, clostridium botulinum, VHB, VHC y VIH, porfirinas totales, Vit B12, ácido fólico, metabolismo de hierro, VSG, hormonas tiroideas, perfil lipídico, proteinograma e inmunoglobulinas, CPK, aldolasa, alfa-1-antitripsinay anti IA2.
  • En orina: metales pesados en orina (mercurio, plomo y arsénico), porfirinas totales en orina.
  • En la bioquímica del LCR se detectó una disociación albumino-citológica (líquidotransparente, sin color. Leucocitos 7, mononucleares 100%, hematíes 15 de aspecto espiculado, glucosa 55mg/dl, proteínas 125,7mg/dl, ADA 3,8 U/L), y se inició tratamiento con inmunoglobulinas intravenosas durante 5 días.
  • Posteriormente, se realizó RMN con contraste (sin alteraciones) y ENG/EMG informadocomo signos de polineuropatía sensitivo-motora, de predominio sensitivo, axonal y desmielinizante con afectación predominante por la región más distal de extremidades superiores e inferiores. Lesión de grado moderado, que no encaja en el patrón típico de un síndrome de Guillain –Barré. Los resultados del resto de pruebas realizadas en sangre, LCR y orina fueron negativas o en límites normales, excepto por un resultado:




La PCR de Tropheryma Whipple en LCR que fue positiva.



Tras los hallazgos descritos, se diagnostica  Enfermedad de Whipple con síntomas neurológicos como forma de presentación, además de afectación articular. Y se inició tratamiento con ceftriaxona intravenosa.


DISCUSIÓN
Consideramos fundamental destacar en este caso:
  • Las manifestaciones clínicas neurológicas en la Enfermedad de whipple aparecen en el 4% de los casos, frente a la afectación articular que ocurre en el 67%.
  • Entre los pacientes con enfermedad de Whipple con afectación neurológica, la clínica inicial que presentaba la paciente de ataxia y déficit sensitivo, aparecen en el 20% y 12% de los casos respectivamente. Por otro lado, las alteraciones a oculomasticatorias tienen una prevalencia del 20%, y también se asocia a esta patología en ocasiones, el síndrome de secreción inadecuada de ADH.
  • El diagnóstico de las formas neurológicas de la enfermedad de Whipple es difícil, y su pronóstico puede ser fatal en ausencia de tratamiento. La prueba diagnóstica de elección es la biopsia a nivel duodenal.
  • La sensibilidad y especificidad de la PCR de Tropheryma Whipplei en LCR es muy elevada, recomendándose en los casos en los que es negativa y existe una alta sospecha clínica, la biopsia cerebral.


DIAGNÓSTICO FINAL: ENFERMEDAD DE WHIPPLE

Fuente: "Vómitos y artromialgias en mujer de 38 años"

E. Alarcón Manoja1, R. Gil de Castro2, M. L. Peinado Cantero2
1Servicio de Medicina Interna UGC Área Sanitaria Campo de Gibraltar. Hospital
Punta Europa, Algeciras (Cádiz)

2FEA UGC Neurología Hospital Punta Europa, Algeciras (Cádiz)